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12.09.2024
Dr. Pablo Verdecchia

Diferencias clave entre esterilidad e infertilidad

Popularmente los términos de esterilidad e infertilidad se utilizan como sinónimo, refiriéndose al hecho de no poder tener hijos.

Hoy queremos presentaros las diferencias clave entre esterilidad e infertilidad

ESTERILIDAD

Se denomina esterilidad a la incapacidad para concebir tras un año de relaciones sexuales frecuentes y no protegidas. En este caso no se produce fecundación.

INFERTILIDAD

Por el contrario, la infertilidad es la incapacidad de llevar a término un embarazo. Es decir, si hay embarazo pero se interrumpe de forma involuntaria antes del nacimiento. En este caso sí se consigue la fecundación pero viene acompañada de un aborto.

La aproximación médica en cada uno de los casos tampoco es la misma.

En este artículo, te explicaremos de manera sencilla cuál es la diferencia entre esterilidad e infertilidad. Saber cómo se diagnostica y cuáles son las opciones disponibles para quienes enfrentan estos desafíos es clave.

Cómo abordar médicamente la esterilidad y la infertilidad

Muchos de los casos de infertilidad femenina pueden tener una solución quirúrgica debido a que el problema viene de alteraciones anatómicas o funcionales. Las alteraciones más frecuentes suelen ser la endometriosis, quistes, tumores, pólipos, miomas o adherencias en las paredes del útero, entre otras.

En estos casos, una intervención quirúrgica por parte de un equipo de expertos en laparoscopia ginecológica puede suponer la solución a la infertilidad femenina. Con ello buscamos devolver la capacidad de tener un embarazo natural.

En cambio, la esterilidad puede ser debida a muchos factores y la solución en su mayoría es iniciar un proceso de fecundación con técnicas de reproducción asistida. También es posible que la esterilidad se resuelva de forma espontánea.

¿Qué es la esterilidad?

Tal como anunciábamos, la esterilidad se refiere a la incapacidad permanente de concebir un hijo. Esto significa que una persona, ya sea hombre o mujer, no puede generar un embarazo de manera natural debido a factores biológicos o anatómicos. En términos simples, una persona estéril no puede tener hijos.

Existen dos tipos principales de esterilidad:

  1. Esterilidad primaria: Ocurre cuando una pareja nunca ha logrado un embarazo. Y ello a pesar de mantener relaciones sexuales sin protección durante un año o más.
  2. Esterilidad secundaria: Se presenta cuando una pareja ha tenido hijos previamente, pero ahora no puede concebir nuevamente.

Entre las causas más comunes de esterilidad en mujeres se encuentran problemas como la obstrucción de las trompas de Falopio, la ausencia de ovarios o útero, o trastornos genéticos. En los hombres, la esterilidad puede deberse a la ausencia de espermatozoides en el semen o a una baja calidad espermática.

¿Qué es la infertilidad?

La infertilidad, a diferencia de la esterilidad, es la dificultad o incapacidad temporal para lograr o mantener un embarazo después de intentarlo durante al menos un año. A diferencia de la esterilidad, una persona infértil sí puede concebir, pero tiene dificultades para que el embarazo prospere de manera exitosa o para mantenerlo hasta término.

Existen dos tipos de infertilidad:

  1. Infertilidad primaria: Ocurre cuando una mujer nunca ha logrado llevar un embarazo a término, aunque haya conseguido concebir.
  2. Infertilidad secundaria: Se refiere a la incapacidad de llevar a término un embarazo después de haber tenido al menos un hijo.

La infertilidad puede deberse a múltiples factores, como desequilibrios hormonales, problemas en el revestimiento del útero o trastornos ovulatorios. En el caso de los hombres puede deberse a problemas de movilidad o cantidad de espermatozoides. Un aspecto importante de la infertilidad es que muchas de sus causas pueden ser tratables, lo que permite a las parejas mejorar sus posibilidades de concebir con el apoyo adecuado.

Diferencias clave entre esterilidad e infertilidad

Aunque ambos términos hacen referencia a problemas de reproducción, existen diferencias clave:

  • Esterilidad es la incapacidad total de concebir, mientras que infertilidad se refiere a la dificultad de concebir o de llevar un embarazo a término.
  • En la esterilidad, la concepción no es posible sin intervención médica avanzada. En el caso de la infertilidad, la concepción puede ser posible con tratamientos, cambios en el estilo de vida o apoyo médico especializado.
  • La infertilidad puede ser una situación temporal o tratable, mientras que la esterilidad suele ser permanente.

Diagnóstico y tratamiento

Para diagnosticar tanto la esterilidad como la infertilidad precisamos realizar una serie de pruebas. En el caso de las mujeres éstas incluyen exámenes hormonales, ecografías o estudios de las trompas de Falopio y del útero. En los hombres a menudo solicitamos realizar un análisis de semen para evaluar la calidad y cantidad de espermatozoides.

Una vez diagnosticados, los tratamientos varían según el caso. Para la infertilidad, los tratamientos más comunes incluyen medicamentos que estimulan la ovulación, procedimientos como la inseminación artificial o la fecundación in vitro (FIV). Todos ellos pueden aumentar significativamente las posibilidades de concepción. También existen opciones de cirugía para corregir problemas anatómicos en el sistema reproductivo de la mujer o el hombre.

En el caso de la esterilidad, las opciones suelen ser más limitadas. Si la mujer no puede concebir de manera natural, puede optar por técnicas de reproducción asistida, como la donación de óvulos o esperma.

En definitiva…

Deseamos haber aportado un poco de luz para entender las diferencias clave entre esterilidad e infertilidad. Importante conocer la diferencia entre ambos términos sobre todo para aquellas mujeres que tienen dificultades en la búsqueda de un embarazo.

Por todo ello, y porque a menudo atendemos a mujeres con dudas sobre cuál es el origen de su problema, recomendamos visitarnos. Con ello conseguiremos realizar un diagnóstico preciso y aconsejar las opciones de tratamiento más adecuadas a cada caso.

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