Cómo fortalecer el sistema inmune
Reforzar nuestro sistema inmunitario es importante a cualquier edad
Cómo fortalecer el sistema inmunitario
Enfocarse en hábitos saludables
En estado de pandemia no hay mayor inmunidad como la que proporciona la vacuna. Pero un sistema inmune en buen estado refuerza nuestra armadura natural frente a las agresiones externas. Conocer cómo fortalecer el sistema inmunitario y cómo funciona éste es importante. El trabajo del sistema inmunitario consiste en detectar y neutralizar atacantes como virus y bacterias ¿Podemos fortalecerlo de forma natural? Sin duda, optar por el sentido común es el primer paso. Cómo fortalecer el sistema inmune comporta varios elementos. Llevar una vida equilibrada, seguir la dieta mediterránea, practicar deporte, hacer vida al aire libre, limitar el estrés en la medida de lo posible y dormir bien, son factores que contribuyen a su buen funcionamiento.
Dieta mediterránea para fortalecer el sistema inmunitario
Más que una pauta nutricional, la dieta mediterránea es un estilo de vida sabroso y saludable que pasa de generación a generación como un tesoro. Una alimentación que utiliza el aceite de oliva como principal fuente de grasa y recomienda tomar abundantes alimentos de origen vegetal como frutas, verduras, legumbres, champiñones y frutos secos. Prioriza los alimentos frescos, de temporada y poco procesados. Como fuente de proteina no olvidar la ingesta de pescado azul mínimo dos veces a la semana y limitar el consumo de carne roja y huevos. El pan y los cereales (especialmente integrales) forman parte de la alimentación diaria, así como el yogur y los quesos. El agua es la bebida por excelencia, y el vino se toma con moderación (una copa) durante las comidas. Los complementos alimenticios a base de vitaminas y minerales solo son necesarios en casos de carencias puntuales. La mejor opción es realizar su aporte de forma natural a través de la dieta.
Buen descanso: sueño reparador
Dormir 7 u 8 horas al día optimiza la respuesta inmunitaria y contribuye a que el cuerpo se regenere durante la noche. En cambio, el insomnio debilita la inmunidad y contribuye al agotamiento físico y mental. Desarrollar una rutina de sueño adecuada es el primer paso para fortalecer nuestro sistema inmunitario. Unos buenos hábitos empiezan por ponerse una alarma que avise que hay que ir a dormir, evitar llevar el móvil o demás aparatos electrónicos a la cama y lograr un ambiente oscuro y tranquilo que anime a la relajación.
Realizar ejercicio físico, pero no demasiado
Para mantenerse en forma nada mejor que realizar ejercicio físico de intensidad moderada adaptado a nuestras condiciones físicas. Es importante encontrar la rutina adecuada y hacerla de forma regular varias veces a la semana para estimular la inmunidad celular. ¡Y cuidado! Los entrenamientos prolongados o de alta intensidad, sin un buen descanso posterior, producen el efecto contrario. El sobreentrenamiento somete al cuerpo a un gran estrés que puede provocar un bajón del sistema inmunológico.
Gestionar el estrés para fortalecer el sistema inmunitario
El estrés y ansiedad son responsables de muchas de nuestras respuestas físicas. Si no se controlan pueden afectar al sistema inmunológico haciendo que bajen las defensas. Pero, además, el estrés puede perjudicar de diferentes formas la salud vaginal. Provoca que el cuerpo libere cortisol, y esto desequilibra la producción de otras hormonas y, como una reacción en cadena, puede producir sequedad vaginal. La sequedad vaginal puede comportar menor lubricación genital y mayor propensión a las infecciones.