Uso de factores de crecimiento en ginecología
¿Qué son los factores de crecimiento?
El uso de factores de crecimiento en ginecología es una terapia autóloga ya que utiliza nuestro propio plasma sanguíneo aunque con una concentración de plaquetas superior al nivel basal. El Plasma Rico en Plaquetas (PRP) es un tratamiento autólogo con factores de crecimiento. Es rico en proteínas, factores de crecimiento y factores de coagulación.
Otra importante propiedad de los factores de crecimiento o también denominados tratamientos autólogos con factores de crecimiento es que favorece, acelera y acorta todo el proceso de curación y cicatrización de las heridas.
Lo utilizamos en patología ginecológica por sus propiedades regenerativas antiinflamatorias e inmunomoduladoras. El uso factores de crecimiento nos permite tratar y solucionar determinadas patologías ginecológicas de difícil curación y que no han respondido a otro tipo de tratamientos.
Cada caso y cada paciente son únicas
Sería difícil intentar en el blog resumir todos sus beneficios, si bien queremos destacar que es importante la personalización del tratamiento en cada caso y cada mujer. Según el estudio previo que hagamos de cada paciente. A veces quizás solo apliquemos factores de crecimiento, en otros casos lo combinaremos con ácido hialurónico y en otros casos quizás recomendemos la aplicación del láser vaginal como mejor solución. A menudo realizamos un mix de tratamientos que combinados con hábitos de vida saludables. Los suplementos vitamínicos han demostrado también ser muy eficientes para mejorar la calidad de vida de la paciente.
Plasma Rico en Plaquetas (PRP) y ácido hialurónico
En ocasiones los factores de crecimiento los asociamos al ácido hialurónico en una concentración aproximadamente de 2ml al 2%. El ácido hialurónico es un polisacárido no reticulado de bajo peso molecular y de origen biotecnológico. Por todo ello los factores de crecimiento ayudan a la recuperación de los tejidos y favorecen la hidratación, la tonificación y la bioestimulación.
El Plasma Rico en Plaquetas (PRP) se obtiene en la propia consulta a través de una extracción de sangre con un vacutainer que posteriormente se recolecta al vacío. A continuación se coloca en una centrifugadora, y tras mezclarlo suavemente se obtiene el plasma separado del resto de sangre, listo para ser implantado en la paciente. La durada de dicho procedimiento puede ser de unos 30 minutos y se realiza el mismo día en la consulta.