Semana 25 del embarazo
Los ojos de tu bebé a partir de la semana 25
A partir de la semana 25 del embarazo tu bebé empieza a abrir los ojos, aunque no puede ver nada debido a la oscuridad que le envuelve. Ya se han formado sus pestañas pero, en cuanto al color de los ojos, no se determinará hasta algún tiempo después de su nacimiento. Esto es así porque los pigmentos que darán lugar a ese color necesitan luz para formarse totalmente.
Ya mide más de 25 centímetros y pesa unos 700 gramos. Hasta estas alturas del embarazo el peso de todos los bebés es muy parecido. A partir de ahora, en cambio, dependerá de su genética y de su sexo ya que, por lo general, los niños pesan algo más que las niñas.
Pero aún sigue siendo pequeño en relación con el espacio del que dispone, de manera que se mueve mucho y cambia de posición varias veces al día. Incluso se pone boca arriba. Pero, no debes preocuparte ya que no significa que permanezca así hasta el parto.
En las ecografías pueden verse esos frecuentes movimientos, los gestos de su cara y cómo se chupa los dedos. También oír los rápidos latidos de su corazón, con una frecuencia entre los 120 y los 160 por minuto.
Cuidados para ti, mamá
Ahora tu embarazo ya es más que evidente. Procura llevar ropa holgada, cómoda, con ropa interior que se adapte al aumento de volumen de las distintas partes de tu cuerpo. El algodón es el tejido más adecuado.
Es alrededor de la semana 25 del embarazo cuando muchas embarazadas notan ardores de estómago y reflujos. En parte debidos a la progesterona, la hormona del embarazo, que ralentiza la digestión. Asimismo, puede provocar que los jugos gástricos pasen al esófago.
Otra causa es el aumento de tamaño de tu bebé, que comprime el estómago y deja menos espacio para digerir los alimentos.
Unas molestias que pueden disminuir si comes más veces al día, con menos cantidad en cada comida. Es asimismo conveniente evitar las bebidas con gas y dejar que pasen un par de horas entre la cena y el momento de acostarte.