¿Sequedad vaginal? Ya tiene solución

¿Debo resignarme a tener sequedad vaginal solo por un tema de edad?

Un tema que era tabú y a menudo asumido por las mujeres como algo propio de la edad, empieza a ser un tema recurrente en las consultas ginecológicas con las pacientes a partir de cierta edad. Ello nos está permitiendo poderles ofrecer soluciones en función de cada caso. Porque como dice el refrán: «El reconocimiento del problema es la mitad de la solución.»

Con la llegada de la perimenopausia o la menopausia, muchas mujeres se han resignado a sufrir sus síntomas en silencio. Como algo normal contra lo que no se puede hacer nada. Los sofocos y el insomnio son consecuencias de la pérdida de hormonas. Pero tambien hay que destacar la inapetencia sexual y los cambios de humor como consecuencias del cambio hormonal que sufre el cuerpo durante el periodo del climaterio. En concreto en gran parte es debido a la disminución de la producción de estrógenos y progesterona. El grado de las afectaciones varia sin duda en función de cada mujer.

¿Cómo combatir la sequedad vaginal?

La sequedad vaginal es uno de los síntomas que más afectan a la vida diaria y, sobre todo, a las relaciones de pareja y a la plenitud de la vida sexual de la mujer.

Actualmente, existe un tratamiento con hormonas naturales que permite aumentar los índices hormonales alterados por el climaterio, sin riesgos ni efectos secundarios, y que reduce sensiblemente los efectos de la menopausia.  Pero hoy no queremos centrarnos en eso, aunque podéis consultar más información sobre el tratamiento con hormonas naturales en este enlace.

Ventajas del Láser en la zona vaginal

Indicar también como alternativa o complemento, las ventajas que el  Láser Intravaginal de CO2 tiene sobre la sequedad vaginal.

El calor que desprende el láser estimula la producción de las células de la zona vaginal y sustituye las capas secas de la piel por nuevas células.

Esto permite el rejuvenecimiento de las células del epitelio vaginal, el aumento de la producción del colágeno y la hidratación de la mucosa genital. La consecuencia es una mejora sensible de la lubricación vaginal y, por tanto, de la mejora de las relaciones sexuales.

La mujer debería poder gozar de relaciones sexuales plenas en cualquier etapa de la vida, también durante el climaterio.