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26.05.2011
Clínica Ginecológica

Incontinencia Urinaria de Esfuerzo (IUE): Causas y posibles tratamientos

A pesar  de las molestias ocasionadas por la IUE y su repercusión en la vida cotidiana, un porcentaje elevado de mujeres no consultan al médico. Se estima  que sólo del 25 al 33% de las mujeres con IU solicitan asistencia médica. Este porcentaje se eleva hasta un 54% en los casos de IU intensa, que es cuando los síntomas se acentúan. Muchas mujeres sienten vergüenza de este trastorno y prefieren no hablar de él, pero el hecho más importante es que además, tienen dudas antes de solicitar ayuda porque confían muy poco en el tratamiento, temen la cirugía o piensan que es una consecuencia normal del envejecimiento o de los partos.

Por tanto las pacientes que presentan IUE se plantean con frecuencia una serie de preguntas como:

¿Representa la IUE un proceso normal del envejecimiento?
La pérdida involuntaria de orina nunca se considera normal. Existen varios factores de riesgo asociados a la IUE;  los estudios epidemiológicos revelan que el mayor riesgo se encuentra en las mujeres de edad mediana y que afecta al 20% de las mujeres de 50 años. Sin embargo la IUM es el tipo más común de IU entre las mujeres ancianas. Por tanto, las mujeres de cualquier edad pueden presentar síntomas urinarios relacionados con el esfuerzo, acompañados, o no, de síntomas adicionales de urgencia urinaria.
Los síntomas varían con el tiempo, pero cuando son persistentes requieren estudio y tratamiento adecuados.

¿Se agravará mi incontinencia urinaria de esfuerzo con el envejecimiento?
Los cambios en la vejiga y en las estructuras del suelo pélvico asociadas al envejecimiento contribuyen al empeoramiento de la IUE. La menopausia y la disminución de estrógenos junto a otros problemas médicos propios de la edad,  como diabetes o demencia,  pueden empeorar la IUE.

¿Cuál es la causa de la IUE?
La IUE consiste en la pérdida involuntaria de orina con el esfuerzo, el ejercicio, el estornudo  o la tos. La continencia se mantiene cuando la presión dentro de la uretra es mayor que en la vejiga. La presión abdominal aumenta con el ejercicio o la tos, y se debe transmitir por igual a la vejiga, al cuello de la vejiga y a la uretra. Sin embargo, cuando la presión de la vejiga excede la de la uretra, la orina se escapa por la uretra. La causa subyacente puede ser una hipermovilidad del cuello de la vejiga y de la uretra porque carece del apoyo externo (vagina y suelo de la pelvis). La IUE también puede ocasionarse por un defecto intrínseco del esfínter uretral como consecuencia de problemas neuromusculares.

¿Debo adelgazar para solucionar la IUE?
En algunos estudios se ha comprobado que existe una correlación entre la obesidad e índice de masa corporal. El sobrepeso se transmite a las estructuras del suelo de la pelvis que se distienden junto a un debilitamiento de los músculos y el tejido conjuntivo, ocasionando una hipermovilidad del cuello de la vejiga o uretra que justifica el escape de la orina durante el esfuerzo. Una pérdida de peso reduce la intensidad e incluso puede favorecer la remisión de los síntomas de IUE.

¿Mejorará la IUE  con una dieta especial?
Es muy importante una vigilancia cuidadosa de líquidos y alimentos.  Es aconsejable una reducción de la ingesta de líquidos, pero tampoco se recomienda que sea llamativa porque la vejiga es sensible a los volúmenes bajos. Se recomienda beber entre 1,5 y 2 litros al día. También se debe evitar el estreñimiento mediante dieta rica en fibra y si es necesario con la ingestión de laxantes.

¿Puedo continuar con la actividad física?
Las actividades con mayor impacto pueden desencadenar IUE. Sin embargo, cierta actividad física ayuda la salud general y la IUE no es motivo para restringir toda la actividad física.

¿Debo dejar de fumar?
No se ha demostrado una correlación directa entre tabaco e IU. Sin embargo el tabaco comporta un riesgo elevado de enfermedades pulmonares. Ciertas enfermedades, como la bronquitis crónica, el enfisema, la tos crónica … aumentan de forma irreversible la presión abdominal y en consecuencia se eleva el riesgo de los síntomas de IUE. Por tanto al dejar de fumar disminuyen los factores de riesgo para la IUE.

¿Por qué mi IUE empezó después de dar a luz?
La IUE es muy común entre las mujeres embarazadas, probablemente por el aumento del tamaño del útero y la presión consiguiente contra la vejiga. La IUE suele remitir después del embarazo pero puede persistir tras el parto aunque no definitivamente. El parto supone un esfuerzo elevado para el suelo de la pelvis y el tracto urinario con el consiguiente daño de estas estructuras.

¿Cuál es resultado de los ejercicios de Rehabilitación del Suelo de la Pelvis (RSP)?

Sirven para fortalecer los músculos del suelo de la pelvis y aumentan el apoyo de la uretra y de la pared vesical, por lo que ayudan a evitar la IUE. En general, se acompaña de una mejoría de los síntomas.

¿Debo proseguir con los ejercicios de RSP ahora que ha mejorado mi IUE?
La pauta concreta de ejercicios se debe adaptar a cada paciente según el estado de su musculatura. El mayor inconveniente es el incumplimiento a  medida que pasa el tiempo, ya que los ejercicios deberían mantenerse de manera indefinida.

¿Es la cirugía la única modalidad de tratamiento para la IUE?
Existen medidas conservadoras para mejorar la IUE antes de plantear la cirugía. El tratamiento se basa en modificaciones de los hábitos de vida, como disminución de peso, abstención del tabaco, ingestión correcta de líquidos y ejercicios de rehabilitación del suelo de la pelvis con todas sus variantes.

Si tiene alguna otra duda sobre la IUE  no dude en contactar con nuestro centro o pedir hora con los médicos de la Clínica Ginecológica Dr. del Pozo.

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