Amplitud vaginal: ¿qué es y cómo se soluciona?
El láser ginecológico: una solución efectiva para la amplitud vaginal.
¿A qué llamamos amplitud vaginal y cómo puede una mujer saber si la tiene?
Durante un parto traumático o en edad tardía, los músculos de la vagina pueden quedar afectados y no recuperar del todo su estado normal, causando así lo que se denomina como amplitud vaginal.
Otros factores como la pérdida de colágeno durante la menopausia también contribuyen a reducir la elasticidad y fuerza de los músculos de las paredes de la vagina y favorecen así la amplitud vaginal.
Sufrir amplitud vaginal hace que la mujer que la padece se note “más abierta” –palabras textuales de una paciente en consulta. Eso comporta que no pueda disfrutar de las relaciones sexuales como antes y pueda padecer leves problemas de incontinencia así como problemas de sequedad vaginal.
¿Existe alguna solución para la amplitud vaginal?
El láser intravaginal es una técnica ambulatoria, sin necesidad de cirugía y mínimamente invasiva, que permite estimular la producción de colágeno de la zona íntima. En consecuencia permite tensar y tonificar los músculos, consiguiendo una mejoría en la hidratación y elasticidad de las paredes vaginales.
De este modo se consigue rejuvenecer la zona íntima de la mujer y conseguir unas condiciones preconcepcionales y un canal vaginal más estrecho.
¿Por qué el láser?
El láser intravaginal de CO2 fraccionado es una técnica indolora, que se realiza en consulta y no precisa de ingreso hospitalario. El tratamiento tan solo dura aproximadamente 30 minutos tras los cuales la paciente vuelve a su domicilio. La energía calorífica que desprende el láser contribuye al rejuvenecimiento de las células superficiales del epitelio vaginal para que estas produzcan más colágeno.